domingo, 26 de marzo de 2017

Emociones ocultas en la espalda

EMOCIONES OCULTAS EN LA ESPALDA


Las emociones y sentimientos reprimidos pueden causarnos enfermedades como gastritis, catarros, gripes, dolores de cabeza,  eccemas cutáneos ......, pero también dolor de espalda. Se ha comprobado mediante diversos  estudios que las emociones afectan a los dolores crónicos de espalda. 
Los cinco sentidos se encuentran localizados en la parte anterior del cuerpo físico.  Aquellas emociones que nos hacen sentir incómodos y de las que nos estamos preparados para gestionar, se acumular en la parte motora (espalda) y no en la sensorial del cuerpo (parte anterior). Todo lo que no estamos preparados para sentir lo depositamos en la mochila que llevamos en la espalda, lo cargamos sin sentirlo, sin verlo, oírlo.....  Vamos arrastrando este peso a veces sin darnos cuenta de la carga que llevamos, hasta que tomamos conciencia de ello, hasta que podemos sentirlo y averiguar sus raíces para poder sanarlo
Emociones como quizás  el ver a alguien a quien tenemos afecto enfermos - vista.  Oír alguna conversación en las que nos sintamos humillados - oído.  Sentir aromas que nos llevan a épocas no placenteras - olfato.  Saborear sabores que nos evocan a la cocina de alguien querido que ya no está a nuestro lado - gusto.  Sentir o palpar algo que nos produce rechazo por trasladarnos a épocas no agradable - tacto  son ejemplos de cargas que a veces inconscientemente depositamos en nuestra espalda
La  columna vertebral en sí misma, representa simbólicamente “el soporte que sentimos en la vida”. La forma en que nos sentimos fuertes, comprendidos, apoyados por la familia, apoyados por los amigos, etc. La columna vertebral es físicamente, el soporte de todas las cargas físicas y emocionales, es el pilar de nuestra existencia, no sólo por su función estructural, sino por lo que ella recubre y protege, nuestro sistema nervioso.
La biodescodificación, relaciona las molestias no solo en la espalda,  así como cualquier otro dolor físico y anímico y sus síntomas con emociones bloqueadas, con emociones y sentimientos no conscientes. Muchas enfermedades (Síntomas), están relacionadas con la espalda, muchas de ellas, provocadas por pequeños desplazamientos de las vértebras que oprimen los nervios que sustentan nuestros órganos y distintas partes del cuerpo, o por desgaste de las mismas, traumatismos, etc. Pero sea cual sea el síntoma, es debido a una emoción, y dependiendo del grado de conflicto emocional, es la cantidad de dolor que se presenta. 
Definitivamente, el cuerpo grita lo que la mente calla

Los estados emocionales también pueden afectar al resto de nuestro cuerpo, aunque en la espalda le generaran un trabajo extra, aquejando la respiración, impidiendo que entre el suficiente aire para mantener la fuerza necesaria. El estrés castiga nuestro estado físico y emocional, nos produce impotencia muscular, orgánica y hasta mental. La musculatura que cubre la parte superior de nuestra espalda indica como nos sentimos, si estamos contentos el cuello estará derecho, nuestro semblante relajado, y sin tensiones, pero si estamos tristes, nuestra mirada se dirigirá al suelo, igual que el cuello y la cabeza que se inclinarán hacia adelante.
También nos sentiremos cansados y desanimados, sin ninguna causa aparente, esto está provocado porque respiramos mal, y no tenemos la energía suficiente para actuar. La musculatura estará rígida, y la circulación sanguínea será lenta, tendremos dolor de cabeza, la vista cansada y el sistema digestivo con molestias.

Las Vértebras cervicales

Colocadas dese la base del occiput y hasta el cuello, se relacionan con la comunicación (cuerdas vocales en la parte anterior y oído, tan necesario en la comunicación como el habla)  y como afrontamos la vida.  Representan nuestra flexibilidad para cambiar, para superar, para enfrentar lo que se vive. Un dolor en el cuello puede indicar negación, rigor, y obstinación. Sería interesante hacer una pequeña reflexion interna y ver qué tan flexible o qué tan terco se es.. Entre más obsesivo sea uno por hacer las cosas a su manera y a su modo y entre más se niegue a cambiar o a hacer cosas diferentes o a hacer las mismas cosas de manera diferente, es más probable que se sufra dolores de  cuello.  Si se amanece con dolor en el cuello, quizás es porque se viene pensando durante demasiado tiempo en determinadas cosas sin opción a flexibilizar, a cambiar,  no solo porque se haya dormido en mala postura.
Si el dolor de espalda, ocurre al nivel de los hombros, puede significar  que existe una falta de apoyo emocional por parte de tus seres queridos. Te sientes sólo en ese importante proyecto, te sientes sin apoyo para hacer algo, necesitas amor y abrazos que te motiven. En el momento en que tu seguridad crezca y no necesites la aprobación de los demás, adiós dolor. Tú puedes.
Las Vértebras dorsales.


Son las vértebras a la altura del pecho. El dolor en éstas vértebras, provoca que nos inclinemos hacia adelante, como si cargáramos un gran peso en la espalda. Estas vértebras suelen doler cuando nuestra vida diaria está llena por responsabilidades que no queremos, o que no podemos aceptamos. Y puede ser tan simple como lavar los platos, planchar o cualquier actividad que “no nos gusta”. O puede ser cargar con la responsabilidad de mantener a toda una familia, cuidar de alguien, realizar un trabajo que no nos complace.
Cuando duelan estas vértebras, una opción es preguntarnos que estamos haciendo algo que no nos gusta, o que responsabilidades estamos cargando que nos impiden disfrutar y las que no aceptamos  La parte central de la espalda, (situadas entre pecho y ombligo), pero en la parte posterior, representan la culpa. Son las vértebras más pequeñas y menos flexibles de nuestra espalda. Los dolores en dichas vértebras, pueden deberse a angustia, estrés, inquietud, ansiedad, tristeza, pero sobre todo de culpabilidad por algo que hemos hecho, hemos dejado de hacer, hemos dicho o nos hemos callado lo que hubiéramos necesitado decir.
Cuando nos duelan estas vértebras, nos podemos preguntar con qué nos hemos comprometido sin quererlo o por qué nos preocupamos más por los demás que por nosotros. ¿Te comprometiste a cuidad a tus sobrinos cuando en realidad querías ir a cortarte el pelo? Cosas tan simples como este ejemplo, pueden hacer que duela la parte media de la espalda, ya imaginarás un compromiso mayor. O una culpa mayor.
Las Vértebras lumbares.

Estas vertebras van desde la cadera hasta el coxis, esas que representan la verdadera esencia de cada uno y aquello que no podemos negar. Esta zona representa la propia voluntad y el equilibrio y hasta la vida espiritual, la verdadera naturaleza de cada individuo  está determinada por esta zona.  Se puede andar por la vida diciendo que se vive en paz, que no experimentamos preocupaciones, pero de pronto, viene un dolor en esta parte que nos dice: “la verdad es esta….” Necesitas preocuparte menos por el dinero… Necesitas moderación en tu vida sexual…. Necesitas vivir en equilibrio…. Necesitas tener fe…  También está relacionada con conflictos de desvalorización, en cuanto a la supervivencia 
Así que cada vez que sientas dolor en esta zona, además de analizar si realmente tu vida es tan buena como la pintas, piensa qué fue lo último que compraste o en qué gastaste que te hizo sentir que estabas “gastando mucho”. El simple hecho de tomar conciencia de que el dinero viene y va y que llegará más y que por gastado en “aquello” no quedarás pobre, te anulará el dolor.
La espalda es la zona de fé, de la esencia, empecemos a confiar en que el universo nos proveerá lo que necesitemos y nunca nos faltará nada




jueves, 9 de febrero de 2017

NUESTRO MIEDO MAS PROFUNDO





Nuestro miedo más profundo no es que seamos inadecuados.


Nuestro miedo más profundo es que somos poderosos sin límite.

Es nuestra luz, no la oscuridad lo que más nos asusta.

Nos preguntamos: ¿quién soy yo para ser brillante, precioso, talentoso y fabuloso?

En realidad, ¿quién eres tú para no serlo?

Eres hijo del universo.

El hecho de jugar a ser pequeño no sirve al mundo.

No hay nada iluminador en encogerte para que otras personas cerca de ti no se sientan inseguras.

Nacemos para hacer manifiesto la gloria del universo que está dentro de nosotros.

No solamente algunos de nosotros: Está dentro de todos y cada uno.

Y mientras dejamos lucir nuestra propia luz, inconscientemente damos permiso a otras personas 

para hacer lo mismo.

Y al liberarnos de nuestro miedo, nuestra presencia automáticamente libera a los demás.



Discurso de Nelson Mandela como Presidente Electo de Sudáfrica (1994)